Se me olvidó la foto final del pollo solito. Es una receta muy rápida, fácil, contundente y que está riquísima. No puedo decir otra cosa, la verdad. Hoy ha tocado cocinar con mi amiga Vane, además de divertirnos un montón, hemos experimentado y bueno, los resultados.... jajaja en otra entrada te cuento.
En la foto se ve; el "pan de bagazo de zanahoria y coco" (ya mezclo los bagazos y todo), el pollo con gorgonzola y tortitas de brócoli y patata. (esto lo ves en la siguiente publicación)
INGREDIENTES
- 1 kilo de pechuga de pollo en dados
- sal
- pimienta
- cúrcuma
- 1 cebolla
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- 1 tarrina de queso gorgonzola
- 1 tarrina de queso crema (que puedes sustituir por nata y leche, o nata de soja)
Si ves que se queda demasiado espeso, pues añade algo de leche o bebida vegetal.
Vamos con esta receta. Ahí hay un kilo de pechugas de pollo, aliñadas con sal, pimienta, cúrcuma y un chorrillo de aceite de oliva. Por supuesto, cortadas en dados. Las hemos dejado en el frigo al menos dos horas. Si quieres puedes dejarla de un día para otro.
En una sartén, ponemos a pochar en una cucharada de aceite, una cebolla cortada muy pequeñita.
He aquí la cocinera sonriente¡¡ 😘
Cuando la cebolla está tierna, añadimos el pollo y dejamos que se haga, primero a fuego medio bajo y luego le damos un poco de alegría para que se dore un poquito. Sacamos dejando todo el caldillo posible en la sartén y reservamos.
En ese caldillo, añadimos una tarrina de queso crema, removemos hasta su disolución. Seguido añadimos la tarrina de gorgonzola
Cuando está bien ligado todo, añadimos el pollo otra vez con su caldillo y dejamos que coja el sabor unos cinco minutos.
Listo para comer y guardar para otro día¡¡
Como ya he explicado arriba, nos lo hemos comido con esas tortitas de patata y brócoli, que estaban ricas, ricas.