He puesto al baño maría el chocolate. Uno de mis errores, dejarlo dentro del cazo para que mantuviera el calor, lo suyo es que esté mas o menos a temperatura ambiente. Cuando estaba fundido, añado el café y mezclo con una cuchara. Reservo.
En un cuenco, he batido las claras a punto de nieve. Reservo
En otro cuenco, bato las yemas hasta que blanquean. Esta labor, siempre se hace con el azúcar, pero, en este caso se hace así.
He añadido el queso a las yemas y aquí otro fallo, el queso no solo estaba del frigorífico, sino que estaba en una estantería que estaba medio congelado, así que lo echo a las yemas y mezclo primero con cuchara y luego con las varillas.
Añado el chocolate y otro error importante, recuerda que el chocolate se ha quedado en el fuego y el queso casi congelado, al mezclarlos, se ha hecho un bloque 😕😕😕 me ha costado mezclarlos y aún así se ha quedado grumoso.
Obviamente, no he podido añadir las claras con movimientos envolventes porque no se integraban ni a la de tres, así que este paso está hecho como he podido
Lo paso al molde y meto en el horno precalentado a 180 grados 40 minutos
Cuando pase el tiempo, apago el horno y sin sacar el molde dejo una hora con la puerta entreabierta.
Pasado el tiempo, lo saco, le doy la vuelta y listo¡¡Le he puesto un poco de miel por encima. Aunque con manteca de almendras está muy rico también. Aviso, que está amargo, pero te acostumbras si no piensas que es un postre.
He puesto parte del bagazo de hacer bebida de coco para que no esté tan negro.
Lo repetiré a ver si sale mejor. 😅😅